Mucho se ha hablado de las algas en relación a sus beneficiosas propiedades para la salud. Algunas de ellas han sido simplemente una moda pasajera. Otras, como la espirulina, se han mantenido en la cresta gracias a sus múltiples beneficios. Veamos por qué este alga azulada no pasa de moda en el mundo de la nutrición.
¿Qué es la espirulina?
Conocida también como el oro azul, la espirulina, es un micro alga de color verde azulado y con forma de espiral a la que se le atribuyen gran cantidad de propiedades. Tal es así, que la Organización Mundial de la Salud la llegó a calificar como un superalimento, especialmente por su poder para luchar contra la desnutrición.
El cultivo de este alga es realmente sencillo. Por lo general, su preparación se realiza en forma de tabletas o en polvo, aunque también se puede consumir directamente una vez lavada. La espirulina se utiliza por lo general como suplemento dietético y nutricional, especialmente para personas deportistas preocupadas en su control de peso.
Propiedades de la espirulina
Este alga se caracteriza por reunir gran cantidad de beneficios en su interior. Por este motivo, ha sido y es tan valorada en el mundo de la nutrición. Veamos entonces cuáles son sus características:
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Alto contenido en vitaminas A, C, D y vitaminas del grupo B.
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Rica en minerales, tales como, el calcio, el potasio, el fósforo, el hierro, el magnesio y el zinc.
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Es una fuente natural de proteínas, ya que aproximadamente el 75% de su composición son proteínas.
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También contiene ácidos grasos esenciales poliinsaturados muy importantes para la salud.
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Es rica en antioxidantes, betacaroteno y pigmentos antiinflamatorios.
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Es buena fuente de oxígeno gracias a su alto contenido en clorofila.
Con todas estas características, la espirulina se ha considerado como uno de los suplementos nutricionales con más beneficios para la salud. Los más destacados son:
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Ayuda al crecimiento de las uñas y el cabello.
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Mejora el aspecto de la piel.
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Combate la anemia por su alto contenido en hierro.
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Tiene un gran poder saciante gracias a su fenilalanina. Esto la convierte en una gran aliada para reducir el apetito y controlar el peso.
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Ayuda a reducir el colesterol en la sangre.
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Fortalece el sistema inmunológico gracias a sus propiedades antioxidantes.
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Potencia el bronceado y prepara la piel para el sol a través de sus betacarotenos.
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Es un antiséptico natural.
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Alivia los casos de estreñimiento ya que actúa como estimulador del tránsito intestinal.
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Mejora el rendimiento físico y mental, así como la potencia sexual.
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Disminuye la presión sanguínea diastólica y sistólica.
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Posee propiedades anticancerígenas y anti virales.
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Combate el cansancio y la fatiga crónica.
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Mejora la vista gracias a su alto contenido en vitamina A.
Cómo consumir la espirulina
Acuda siempre a distribuidores de calidad y preste atención a las indicaciones del fabricante. La mejor manera de consumir espirulina es como complemento de una dieta sana y equilibrada. Recuerde que aunque este producto sea natural puede llegar a tener efectos secundarios si no se consume de manera apropiada.