Desayuno proteico: la importancia de las proteínas




Tomar proteína durante el desayuno nos brindará altos beneficios de cara al rendimiento de nuestro entrenamiento. A pesar de que aún muchos creen que lo mejor es levantarse y ayunar, nosotros apostamos por un desayuno proteico completo que te ayude a mejorar tu condición física normal. Así es cómo debe ser un buen desayuno rico en proteínas.

Por qué es importante no saltarse el desayuno

Ten en cuenta que tu última comida fue la cena de la noche anterior. Tu cuerpo ha pasado 8 horas sin recibir alimento alguno, por lo que necesita cubrir esas carencias de energía. Si no desayunamos le estamos diciendo a nuestro organismo que, probablemente, se esté produciendo un periodo de ayuno. ¿Qué hace nuestro cuerpo entonces? Reservar energías en lugar de gastarlas.

Por otro lado, si te saltas el desayuno descontrolarás tus ansias por comer. Desayunar adecuadamente nos permite estar mucho más saciados a lo largo de todo el día. Finalmente, comenzar la jornada sin nada en el estómago te hará estar menos concentrado, de peor humor y sin fuerzas.

El papel de las proteínas

Empezar el día con un buen desayuno en el que las proteínas sean las protagonistas es una forma de mantener a ralla el apetito y las tentaciones por el dulce. Por este y por otros motivos, las proteínas son el alimento preferido por los deportistas. Y es que en parte, los buenos resultados de un entrenamiento dependen directamente del papel de las proteínas en el organismo.

Los alimentos ricos en proteínas proporcionan la estructura y resistencia de las células y tejidos del cuerpo, controlan las reacciones bioquímicas, ayudan al sistema inmunológico y participan en la regulación hormonal.

Ejemplos de un buen desayuno proteico

Para que empieces bien el día y puedas lograr los objetivos deseados con tus horas de entrenamiento te proponemos una serie de ideas para que te prepares un desayuno rico en proteínas. ¡Toma nota!

1.- Tortitas proteicas de plátano:

Son muy sencillas de preparar y te aportarán la cantidad de proteínas que necesitas para esta primera comida del día.

Ingredientes:

  •          1 plátano grande maduro.
  •          2 huevos grandes (o 4 claras de huevo si quieres reducir la cantidad de grasa y de calorías).
  •          1 cazo de proteína en polvo sabor vainilla o plátano.
  •          1 cazo de harina de avena.

Bate los huevos y el plátano de manera que consigas una pasta uniforme. Añade la proteína de suero y la harina de avena. En una sartén caliente añade la mezcla y ve haciendo pequeñas tortitas a las que le puedes añadir un poco de miel al final.

2.- Salvado de avena con yogur griego y frutos rojos:

Este es un desayuno delicioso y muy fácil de preparar. En un recipiente echa el yogur griego y mézclalo bien con el salvado de avena. Trocea unos frutos rojos por encima y listo. Si lo prefieres puedes usar edulcorante para obtener un sabor más dulce.

3.- Huevos duros con atún:

Los huevos cocidos son un gran fuente de proteínas bajas en grasa. Cuece un par de huevos y déjalos enfriar un poco. Abre dos latas de atún y rellena el interior de cada huevo con ellas. Esta receta también la puedes acompañar de un poquito de quinoa o sustituir el atún por una pechuga de pavo/pollo.

4.- Requesón con canela:

El desayuno perfecto para la gente que desea cuidarse a base de proteínas. Este queso es muy bajo en grasas y acompañado de la canela se convierte en un quema grasas natural. Cada vaso solo te aportará 100 calorías.

Empieza el día con energía y no dejes de lado un buen desayuno proteico.